domingo, 14 de diciembre de 2014

Esquema de la La ciudad medieval ( es un folio)


 1. La recuperación de la vida urbana
A partir de finales del siglo XI se produjo en Europa occidental el incremento de la produc­tividad agraria, motivado por el cese de las grandes invasiones y de las guerras señoriales y por los avances en las técnicas agrícolas.
Las principales innovaciones técnicas fueron:
– Nuevos métodos de cultivo: rotación trienal, uso del estiércol como abono, etc.
– Nuevos instrumentos agrícolas: arado normando, collera y herraduras para mejorar la fuerza animal, y molinos de agua o viento para moler el grano.
 El incremento de la productividad agraria comportó:
– El aumento de la población: Europa pasó de tener 45 millones de habitantes en el siglo XII a tener unos 75 millones en el siglo XIV.
– La emigración de campesinos hacia nuevas zonas rurales en busca de nuevas tierras de cultivo, o hacia las ciudades, donde podían gozar de mayor libertad personal.
        El desarrollo del comercio: como la agricultura producía más, los campesinos podían vender los excedentes o intercambiarlos por productos artesanales en mercados locales, y ello favoreció la revitalización o la aparición de las ciudades.

 2. El desarrollo económico de la ciudad
 La ciudad medieval fue un centro de producción de objetos manufacturados. Los artesanos de un mismo oficio (curtidores, plateros, tejedores, etc.) se agrupaban en calles que reci­bían el nombre de su actividad.
 El trabajo artesanal se organizaba en talleres, propiedad de un maestro artesano; el taller y la vivienda solían estar juntos. Los artesanos se agrupaban en gremios para protegerse de la competencia y controlar la producción: fijaban las categorías (aprendices, oficiales y maestros), establecían normas y controlaban la calidad y el precio de los productos.
 Las ciudades eran lugares de mercado habitual. También surgieron las ferias, que eran grandes mercados celebrados cada cierto tiempo. Para articular el comercio interior apare­cieron nuevas rutas terrestres entre ciudades.
 El comercio a larga distancia se efectuaba por mar:
– La ruta del Mediterráneo unía Occidente con Oriente.
        La ruta del Atlántico y del Báltico unía los puertos de la Península Ibérica con los del Nor­te de Europa.
3. La sociedad urbana
 El crecimiento de las ciudades formó un nuevo grupo social no privilegiado: la burguesía. Se dedicaba al trabajo artesanal y al comercio y no dependía de ningún señor feudal.
 El origen de la riqueza de los burgueses era el dinero, no la tierra. Se distinguía entre:
Alta burguesía: formaban parte de ella los grandes comerciantes y los banqueros.
Pequeña burguesía: la constituían los maestros artesanos y los pequeños comerciantes.
 En las ciudades vivían otros grupos sociales: nobles, eclesiásticos y gentes humildes, ade­más de minorías como los judíos.
 El gobierno de las ciudades lo ejercían los magistrados, que velaban por las finanzas, el orden y la justicia, y estaban dirigidos por un alcalde. Con el tiempo, el gobierno quedó en manos de los más ricos: el patriciado urbano.
         A partir del siglo XII surgió un mayor deseo de conocimiento entre la burguesía y algunos nobles, y se desarrollaron en las ciudades las escuelas y las universidades
4. El afianzamiento de las monarquías
 Desde el siglo XII, los reyes se apoyaron en la burguesía, que necesitaba libertad personal y seguridad en sus actividades comerciales, para imponer su autoridad sobre la nobleza y garantizar la estabilidad del reino. Para ello:
– Los reyes concedieron a las ciudades cartas de privilegios, que hacían libres a sus habi­tantes y otorgaban monopolios comerciales y permisos para abrir mercados.
– Los burgueses concedían a los reyes recursos económicos para armar a sus ejércitos y enfrentarse a los nobles.
 Los monarcas quisieron reconocer la importancia de la burguesía aceptando su presencia en las reuniones de las Cortes o Parlamentos. Allí, los representantes burgueses plantea­ban sus peticiones al rey a cambio de concederle dinero.
         El empeño de algunas monarquías europeas por afianzar su poder y establecer fronteras claras entre los diferentes reinos causó conflictos graves, como la Guerra de los Cien Años (1337-1453) entre Inglaterra y Francia.

5. La crisis de la Baja Edad Media (siglos XIV y XV)
 A principios del siglo XIV, Europa sufrió una crisis agraria (sucesión de malas cosechas) cau­sada por un clima desfavorable y por el cultivo de tierras de mala calidad. La consecuencia fue la extensión del hambre por todo el continente europeo.
 Además, las luchas entre señores feudales aumentaron considerablemente, y en 1347, la Peste Negra asoló Europa provocando una gran mortalidad.
 Estos hechos hicieron disminuir la población: la mano de obra se redujo y muchas tierras se abandonaron. Para compensarlo, los señores aumentaron los impuestos (malos usos), lo que todavía empeoró más la vida de los campesinos, y se originaron numerosas revueltas antiseñoriales.

         En las ciudades la mortalidad fue aún más elevada y se redujeron enormemente las activi­dades económicas. La miseria era generalizada y por ello también se produjeron enfrenta­mientos, contra el patriciado urbano y contra los judíos (pogromos).

domingo, 23 de noviembre de 2014

este es el control del tema del feudalismo de mañana

Control final del tema 2

Alumno________________________________________________________2ºc

1º)¿Qué imperio cristiano dominaba Europa y en qué siglo?¿ Qué sucedió a la muerte de su emperador? ¿Qué hizo el emperador para cohesionar el territorio?
2º) ¿Qué es y Cuál es el origen del feudalismo?
3º) Analiza los siguientes texto:
3-A)
3-B ) 3-C )
4º) Expón todo lo que sepas de la Iglesia medieval y de las cruzadas


 5º)

domingo, 16 de noviembre de 2014

Ejercicios tema 2 : El feudalismo

HACER UN COMENTARIO DE TEXTO AL SIGUIENTE TEXTO:

Comentario de texto

 

"El siete de abril (año 1127), jueves, los homenajes fueron de nuevo rendidos al conde. En primer lugar, hicieron los homenajes de la siguiente manera. El conde pidió (al futuro vasallo) si quería convertirse en su hombre sin reservas y aquél respondió: 'lo quiero', después, sus manos, estando juntas entre las del conde que las estrechaba, se aliaron con un beso. En segundo lugar, aquel que había hecho el homenaje expresó su fidelidad en estos términos: 'Prometo por mi fe ser fiel, a partir de este instante, al conde Guillermo y guardar contra todos y enteramente mi homenaje, de buena fe y sin engaños'. En tercer lugar, juró sobre las reliquias de los santos. Seguidamente con la vara que tenía en la mano, el conde dio la investidura a todos aquellos que por este pacto le habían prometido seguridad, rendido homenaje y al mismo tiempo prestado juramento."

                        Boutruche: Señorío y feudalismo. Madrid: Siglo XXI de España Editores


Textos históricos del Feudalismo:


Fórmula de encomendación:

“Al Magnifico señor XX, yo, X, Considerando como es sabido de todos, que no poseo de qué alimentarme o vestirme, he recurrido a vuestra benevolencia, y vuestra voluntad me  ha concedido la posibilidad de poder entregarme y recomendarme a vuestra protección y sostén. Hago esto: vos deberéis ayudarme y mantenerme tanto con víveres como con vestidos en la medida en que yo pueda serviros y merecerlos de vos. Y en

tanto viva deberé serviros y respetaros como puede hacerlo un hombre libre”.

Formulario de Tours, siglos VII-VIII.

 

Ejemplo de juramento vasallático en época carolingia, año 757:

• El rey Pipino celebró asamblea en Compiègne con los Francos. Y hasta allí se llegó Tasilón, duque de Baviera, quien se encomendó en vasallaje mediante las manos. Prestó múltiples e innumerables juramentos, colocando sus manos sobre las reliquias de los santos. Y prometió fidelidad al rey Pipino y a sus hijos, los señores Carlos y Carlomán, tal como debe hacerlo un vasallo, con espíritu leal y devoción firme, como debe ser un vasallo para con sus señores.

(Annales Regni Francorum, en Monumenta Germaniae Historica, ed. Kurze, 1895, 14).

 

El contrato de vasallaje:

• El conde preguntó al futuro vasallo si quería convertirse en su hombre sin reservas, y aquel respondió: “Lo quiero”; después, juntando las

manos que el conde cubrió con las suyas, se aliaron con un ósculo. En segundo lugar, aquel que había hecho el homenaje prometió fidelidad al

delegado del conde en esto términos: “Prometo por mi fidelidad ser fiel al conde Guillermo y guardar contra todos y enteramente mi homenaje, de buena fe y sin engaños”. En tercer lugar, juró esto sobre las reliquias de los santos. Seguidamente, con la vara que tenía en la mano, el conde dio las investiduras a todos aquellos que, por este pacto, le habían prometido homenaje y al mismo tiempo prestado juramento.

Galberto de Brujas, siglo XII.

 

Formas de romper el contrato de vasallaje:

Si alguien quiere abandonar a su señor, que sea autorizado a hacerlo si puede aportar la prueba de los siguientes crímenes: en primer lugar, si el señor ha querido reducirle injustamente a la servidumbre; en segundo lugar, si ha alimentado un propósito contra su vida; en tercer lugar, si ha cometido adulterio con la mujer de su vasallo; en cuarto lugar, si ha avanzado hacia él con la espada levantada para matarle voluntariamente, en quinto lugar, si pudiendo asegurar la defensa

de su vasallo después de que este se encomendó en sus manos, no lo hubiera hecho. Por cualquiera de estos crímenes que un señor haya

perpetrado contra su vasallo, este tiene permiso  para abandonarle”.

Capitular del reino de los francos, siglo IX (801-813).

Ceremonia del vasallaje

Ceremonia de homenaje feudal


Muchos de los ritos vasalláticos se realizaban ante la corte del señor o ante testigos. Si intervenían altos personajes o estaban en juego grandes intereses, los compromisos se registraban en cartas.


La ceremonia pone a un señor en presencia de un vasallo, ligados ambos por un contrato que reviste una fuerza singular. El gran momento es el homenaje. Sin armas, sin cinturón ni caperuza, el dependiente se inclina o se arrodilla ante su señor. Pone sus manos juntas entre las del señor, que las cierra sobre ellas en señal de consentimiento y toma de posesión. Ambos intercambian un beso en la boca, o uno de ellos lo da al otro. Es signo de paz, de amistad y de fidelidad mutua. Sin embargo, el beso no es indispensable. Clásico en Francia y en los países de conquista Normanda a partir del año 1000, se propagó bastante poco en Italia. Es raro en Alemania antes del siglo XIII, sin duda porque la distancia social entre señor y vasallo era más pronunciada.



Un segundo acto sigue inmediatamente al homenaje: el juramento de fidelidad, prestado sobre un objeto sagrado. En ese momento se intercambian algunas palabras:


—¿Queréis ser mi hombre?



—Lo quiero.



—Os recibo como mi hombre.



—Os prometo ser fiel.



El vasallo será amigo de todos los amigos de su señor, enemigo de sus enemigos. El juramento ennoblece el acto vasallático, le da un tinte cristiano y convierte en perjuro a quien viola sus compromisos.



Los juramentos vasalláticos creaban relaciones tan estrechas que se requería la presencia de los interesados y ante todo la del subordinado. Algunas coutumes enumeraban los casos de fuerza mayor que autorizaban a las partes, o a una de ellas, a hacerse representar: minoría de edad, vejez, enfermedad y lejanía frecuente en el vasto Imperio germánico, donde el soberano estaba obligado a hacer largos viajes.


En Inglaterra, según Glanville, el heredero masculino, aunque fuera menor, estaba capacitado para asumir compromisos. La mujer casada no rendía homenaje, pues este deber incumbía al esposo. Y las viudas padecían la misma incapacidad. Se tomaba juramento a todas las personas libres, incluidos los clérigos, los menores y las solteras.


Según ciertas coutumes, no anteriores al siglo XIII o XIV, los juramentos recibidos por procuración deben ser renovados por el vasallo el día en que está en condiciones de cumplir con su obligación.





Bibliografía:
Señorío y feudalismo – Robert Boutruche

Ejemplos de videos de ceremonia de vasallajes

Primer ejemplo
Segundo ejemplo
Tercer ejemplo
Cuarto ejemplo
Quinto ejemplo

Diagrama de un feudo




Un FEUDO es el pago que un señor da a su vasallo para que éste le rinda homenaje. Pero también utilizamos la palabra para designar una propiedad territorial de un señor durante la Edad Media. En este último sentido, el feudo, en cuanto explotación agroganadera, se divide en dos partes:
  • LA RESERVA SEÑORIAL, que el señor explota directamente mediante siervos o con el trabajo de los campesinos que trabajan en los mansos. Allí se ubican el castillo, residencia del señor, los bosques donde se practica la caza, los prados para alimento de los animales y los campos de cultivo del señor. Podríamos también incluir en este apartado las edificaciones a partir de las que el señor obtiene otras rentas como los puentes, molinos, almazaras, lagares...

  • LOS MANSOS son parcelas agrícolas explotadas por campesinos libres que viven en la aldea cercana al castillo señorial. Además de los mansos, cada aldea contaba con campos o prados comunales que servían de lugar donde apacentar al ganado, conseguir leña, cazar, pescar, etc. Además de las rentas que el campesino entregaba al señor por el uso del manso, entregaba a éste otras derivadas de su función jurisdiccional (construcción de caminos, casamientos, herencias...) o señorial (uso obligatorio de los monopolios del señor).

Video de un castillo


Para ver castillos

http://www.fotomusica.net/castillos/index.htm

La ceremonia del vasallaje



Es un compromiso entre señores y vasallos que se realiza mediante una ceremonia pública solemne. Consta de varias partes:
 
 
1- Homenaje. El vasallo coloca sus manos entre las de su futuro señor y declara su voluntad de ser su vasallo, diciendo Señor, me hago hombre vuestro. El señor le responde Os recibo y tomo por hombre.
2- Juramento de fidelidad. De pie, con la mano sobre los textos sagrados, el vasallo  dice Yo te seré fiel a ti, con fe recta, sin malas artes, como un hombre debe serlo para con su señor, sin engaños a sabiendas.
3. Osculum. El señor le dice a su nuevo vasallo Os recibo y tomo por hombre y os beso en señal de la fidelidad.
4. Investidura. es la entrega por parte del señor de un objeto que simboliza la concesión material que se va a entregar al vasallo.

sábado, 1 de noviembre de 2014

RESUMEN DEL TEMA 2


LA EUROPA FEUDAL

 1. El nacimiento de la Europa feudal

Carlomagno, rey de los francos, unificó gran parte de Europa occidental y se proclamó em­perador (800):

–        Para administrar su territorio, lo dividió en condados (gobernados por condes)    y para defender sus fronteras, creó las marcas (gobernadas por marqueses).

– Los sucesores de Carlomagno dividieron el Imperio en varios reinos por el Tratado de Verdún (843), lo que causó inestabilidad en Europa.

 En los siglos IX y X, Europa sufrió diversas invasiones: normandos por el Norte, musulma­nes por el Sur y húngaros por el Este.

El poder de los reyes europeos era débil y fragmentado. Para gobernar y proteger a la po­blación, pactaron con los nobles un sistema de relaciones personales, el vasallaje, que dio origen al feudalismo:

–        El vasallo juraba fidelidad al rey a cambio de tierras (feudos) en una doble ceremonia: el homenaje (el vasallo juraba fidelidad al rey) y la investidura (el rey otorgaba el feudo al vasallo).

–        Los nobles, obispos y abades se convirtieron en señores feudales. A veces, estos señores cedían parte de su feudo a otros.

–        Los señores constituían la única autoridad en su feudo, y los campesinos se ponían a su servicio a cambio de protección.

 El feudalismo dio lugar a la sociedad estamental, dividida en grupos cerrados a los que se pertenecía por nacimiento:

Privilegiados: nobles (dedicados a la guerra) y clero (dedicados a la oración).

No privilegiados: campesinos y artesanos (dedicados al trabajo).

2. La monarquía y la nobleza feudal

 El rey estaba en la cúspide de la sociedad feudal y se le consideraba el primero entre igua­les (sus iguales eran la gran nobleza) y el representante de Dios en la Tierra.

 Las principales atribuciones del rey eran: dirigir los ejércitos de sus vasallos en campañas militares, recaudar impuestos para guerras, coronaciones, etc. y ejercer de juez supremo en litigios o pleitos.

 Para gobernar, el rey contaba con la Curia o Consejo Real, un órgano de carácter asesor integrado por nobles y clérigos. También le rodeaba siempre la corte (familia, amigos y consejeros).

La función de los nobles era ser guerreros; disponían del equipo, el caballo y las armas para combatir, y a los 18 años ya se les armaba caballeros. La guerra les proporcionaba tierras y, en épocas de paz, participaban en torneos para divertirse y entrenarse.

 

3. Los castillos medievales

- Los castillos medievales eran las residencias de los señores feudales. En caso de ataques o invasiones, servían también como refugio para los habitantes del feudo.

- El centro del castillo lo ocupaba la torre del homenaje, lugar de residencia y de vigilancia, rodeada por otras dependencias (graneros, herrería, horno...) y por una muralla. Eran aus­teros y tenían un mobiliario escaso.

          - La vida de los nobles en el castillo consistía en recibir a sus vasallos, impartir justicia, recibir tributos y alimentos de sus siervos, inspeccionar las tierras del feudo y entrenarse para el combate.

          - Las distracciones de los nobles en los castillos eran la celebración de banquetes, las fiestas con juglares y trovadores, la caza, la cetrería y los torneos.

-Las damas organizaban las tareas domésticas, cuidaban a los hijos o se entretenían con la costura, la música y la lectura.

4. Las tierras del feudo

      -Un feudo lo formaban las tierras otorgadas por el rey o un noble a otro señor feudal, junto con sus derechos y oblñigaciones po­dían ser transmitidos en herencia, pero no podían comprarse ni venderse.

-  El feudo se dividía en:

– La reserva señorial: formada por las mejores tierras, era donde solían estar el castillo y los prados y bosques de uso exclusivo del señor.

– Los mansos: eran los lotes de tierra que trabajaban los campesinos libres y los siervos a cambio de rentas (una parte de la cosecha, las primicias -entregas que se hacían una vez al año-, las prestaciones personales -días de trabajo en la reserva señorial-, los derechos de monopolio -por el uso del horno, el molino...-).

- El señor feudal tenía la jurisdicción sobre todo el feudo, es decir, dictaba leyes, controlaba los servicios (molino, horno), impartía justicia, cobraba impuestos, etc.

5. Los campesinos en el mundo feudal

      -Los campesinos eran la mayoría de la población. Se distinguían dos categorías:

– Los campesinos libres, que tenían libertad personal y eran propietarios de su tierra.

– Los siervos, que no tenían libertad personal y estaban ligados a las tierras del señor.

- El rendimiento de la tierra era bajo porque las técnicas y herramientas eran muy rudimen­tarias: se practicaba la rotación bienal (cultivo de la mitad de las tierras mientras la otra mitad se dejaba en barbecho).

- La economía campesina era de autoconsumo, es decir, las personas vivían de lo que produ­cían y se fabricaban ellos mismos las herramientas y todo lo que necesitaban. Los intercam­bios eran escasos.

          -Cultivaban cereales, legumbres, viñedos, verduras y árboles frutales. La dieta de los campe­sinos era muy monótona y comían muy poca carne.

- Sus viviendas eran sencillas: tenían una o dos habitaciones, establo, almacén y cocina. Vi­vían en aldeas o en casas dispersas.

 

6. La Iglesia cristiana: los clérigos

-La Iglesia debía mantener la unidad de los creyentes. Fijaba las obligaciones religiosas y las normas para una conducta correcta. Se encargaba de las ceremonias religiosas (bautizo, matrimonio…), de la enseñanza y de suministrar asistencia a los pobres y a los enfermos.

-Para poder desempeñar estas funciones, la Iglesia tuvo que ruralizarse, es decir, se trasladó al campo, que es donde vivía la mayor parte de la población.

- La Iglesia era muy rica: tenía feudos y cobraba impuestos a todos los campesinos (diezmo).

- Las personas dedicadas al servicio de la Iglesia constituían el clero. Había dos categorías:

– El clero secular, formado por curas, párrocos y obispos, se encargaban de las parroquias.

– El clero regular reunía a los monjes y abades, que vivían en los monasterios.

- Los lugares donde había vivido Cristo se convirtieron en centros de peregrinación, especial­mente Jerusalén (Tierra Santa). Pero en el siglo XI los turcos conquistaron esta ciudad y se prohibió la entrada a los cristianos. Entonces, el Papa decidió reconquistarla y se empren­dieron una serie de guerras, las cruzadas.

Descubre la vida en los monasterios

- Un monasterio estaba formado por un conjunto de edificios y de tierras, cuyo centro era la iglesia. Constituían un feudo que pertenecía a la Iglesia y que también estaba trabajado por campesinos.

          - En los monasterios vivían los monjes, que se dedicaban sobre todo a rezar, pero también a copiar libros en los scriptorium, a trabajar la tierra, a cuidar enfermos, etc.

- Los monjes estaban sometidos a una regla (conjunto de normas), que dependía de la orden monástica a la que pertenecían (benedictinos, cistercienses...).

miércoles, 22 de octubre de 2014

NOS PUEDE INTERESAR

http://www.slideshare.net/landa/la-europa-feudal-2-eso-presentation

ÚLTIMA HORA

Por respeto a otras creencias y  como ejemplo de tolerancia,  no publicaremos en este blog imágenes que puedan herir otras sensibilidades. Por lo que no todos los trabajos de  clase se publicaran

jueves, 9 de octubre de 2014

Atención¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Deberías presentarte en el blog, así yo sabría quien entra y quien lo usa para estudiar.
Os espero antes del jueves 16.
Ese jueves tenemos el control final del tema. Hay que entregar el cuadernillo y tener ya pensando el trabajo manual para presentar el 20 de Octubre.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Tema 1 el Islan

Resúmenes

1. Mahoma difunde una nueva religión


Nace Mahoma___  Cueva de Hira__ ___Hégira___Muere Mahoma

    570                               610                         622                      632

  • A principios del siglo VII surgió una nueva religión: el Islam. Tuvo su origen en Arabia, una península desértica de Oriente Medio. Sus habitantes vivían en los oasis y se dedicaban a la ganadería, la agricultura y el comercio. Eran politeístas y su centro religioso era la ciudad de La Meca, donde se encontraba el santuario de la Kaaba.
  • Mahoma nació en La Meca en el año 570. A sus 40 años, el arcángel Gabriel le anunció que era el profeta de Alá (Dios) y que debía dedicarse a predicar la nueva religión del Islam. Mahoma lo hizo en La Meca, pero fue rechazado y perseguido. En el año 622 el profeta se refugió en Medina: es la llamada Hégira o huida, el inicio de la era musulmana. Convirtió a sus habitantes al Islam y con ellos conquistó La Meca en el 630.
  • A la muerte de Mahoma, en el año 632, la mayor parte de los árabes eran ya musulmanes y Arabia se había unificado políticamente. Los califas pasaron a ser los sucesores de Mahoma y tenían poder religioso y político. Pero no todos los musulmanes aceptaron el poder de los califas, de modo que se dividieron en dos tendencias: los sunitas y los chiitas.

·         Algunas de las características de la religión islámica son las siguientes:

    • Su libro sagrado es el Corán, que contiene las revelaciones de Alá a Mahoma. Define las bases del islamismo y la ley islámica o sharia (normas de conducta individual y social).
    • Establece cinco grandes obligaciones, que son los pilares del Islam: creer en un Dios único, rezar cinco veces al día, ayunar en el mes del Ramadán, dar limosna y peregrinar a La Meca.
    • Las mezquitas son el lugar donde los musulmanes se reúnen para rezar. Su estructura es muy simple: un gran patio abierto, una sala de oraciones, un minarete para llamar a la oración, etc.
    • No tiene sacerdotes, pero sí imanes (dirigen las oraciones), ulemas (interpretan los textos sagrados) y cadís (aplican la justicia según el Corán).

2. La expansión del Islam


·         La primera expansión de los musulmanes se produjo en diferentes direcciones:

    • Los cuatro primeros califas (632-661) conquistaron Egipto, Siria e Irak.
    • Ocuparon el Norte de África y la Península Ibérica, y no pudieron entrar en territorio franco porque fueron derrotados en Poitiers (732).
    • Llegaron a Constantinopla, pero no pudieron tomar la ciudad.

o        Conquistaron Irán, Afganistán, entraron en Asia Central y llegaron hasta Pakistán.

Todos los territorios que iban ocupando quedaban bajo la autoridad de los califas de la familia Omeya, que delegaban su poder en un visir (primer ministro) y en varios emires (gobernadores).

  • Después del año 750, la familia de los Abasíes de Bagdad se hizo con el Califato. Durante su dinastía, el Islam se difundió por África y Asia gracias a la influencia de navegantes y caravaneros, pero se debilitó la unidad califal a causa de la invasión de turcos y mongoles, que continuaron expandiendo el Islam.
  • La conquista musulmana era militar (yihad) y cultural, pero se permitía a los pueblos conquistados mantener su religión y costumbres a cambio de pagar tributos. Sin embargo, muchas personas se convertían al Islam para tener ventajas sociales y económicas.

3. El Islam en la Península Ibérica: Al-Andalus

  • En el año 711, los ejércitos musulmanes, formados por bereberes dirigidos por árabes, invadieron la Península Ibérica. Los visigodos, debilitados por las luchas internas, fueron incapaces de detenerlos y, cuando el rey Rodrigo murió en la batalla de Guadalete, sus tropas se dispersaron.
  • Los ejércitos musulmanes, dirigidos por Tariq y Muza, dominaron la Península en pocos años porque la población no se resistió y los nobles pactaron con los musulmanes para conservar las tierras y el poder. Sólo la zona montañosa de Asturias, donde se refugiaron pequeños grupos cristianos, resistieron a los invasores.
  • El territorio peninsular pasó a llamarse Al-Andalus y se convirtió en un Emirato dependiente del Califato Omeya, con capital en Córdoba.
  • Cuando cayeron los Omeyas, vencidos por los Abasíes, el omeya Abd al-Rahman I se estableció en Al-Andalus y se declaró emir independiente. En esta etapa se sucedieron los conflictos sociales y las luchas de poder, pero empezó también un auge económico y cultural.

4. Del Califato de Córdoba a los reinos de taifas

  • El emir Abd al-Rahman III llegó al poder en el año 912. Dominó militarmente a los reinos cristianos que atacaban Al-Andalus y les obligó a pagar impuestos, garantizó el comercio e impuso su autoridad.
  • En el año 929, Abd al-Rahman se independizó de la autoridad religiosa y se proclamó califa, dando origen al Califato de Córdoba. Fue la etapa de máximo esplendor de Al-Andalus: hubo una gran expansión económica y se frenó a los cristianos, especialmente bajo el califa al-Mansur.
  • A partir del 1008, el Califato sufrió graves divisiones internas, fragmentándose en 25 reinos independientes, las taifas. Estos reinos tuvieron una gran prosperidad económica, pero en el siglo XIII ya habían sido conquistadas por los cristianos, a pesar de la ayuda prestada por los almorávides y los almohades.
  • El reino nazarí de Granada fue la única taifa que se mantuvo independiente hasta finales del siglo XV gracias a su riqueza.

5. Economía y sociedad andalusíes

·         El centro económico en el mundo musulmán era la ciudad. Allí se desarrollaba:
    • La artesanía, una actividad floreciente que ponía a la venta sus productos en los zocos.
    • El comercio, que generaba mucha riqueza. Al-Andalus comerciaba con Europa, el Norte de África y Oriente.
    • La agricultura, sin embargo, ocupaba a la mayor parte de la población. Los musulmanes introdujeron nuevas técnicas de regadío y nuevos cultivos (arroz, cítricos...).
·         La población andalusí musulmana la formaban:
    • Los árabes, que eran la minoría gobernante, la élite política y social.
    • Los bereberes, llegados del Norte de África, eran un grupo de condición humilde.
    • Los muladíes formaban la mayoría de la población, eran los hispanovisigodos convertidos al Islam.
  • La población de Al-Andalus no musulmana la formaban los mozárabes (hispanovisigodos cristianos) y los judíos.

6. Cultura y arte islámicos

  • Entre los siglos VIII y XII, la civilización islámica destacaba por su esplendor, mientras la Europa cristiana padecía empobrecimiento económico y cultural.
  • Al compartir una lengua común, el árabe, los conocimientos se transmitían fácilmente por los territorios islámicos.
  • En la cultura islámica se integraban otras culturas (grecolatina, persa, egipcia, india).
  • Los árabes desarrollaron las matemáticas, la medicina, la cirugía y la astronomía, así como las ciencias aplicadas: sistemas hidráulicos, fabricación de porcelanas, papel, perfumes...
·         El arte islámico tiene las siguientes características:
    • Reúne muchas influencias pero también mantiene unos rasgos homogéneos.
    • En arquitectura se construían mezquitas, alcazabas, palacios, etc., utilizando el ladrillo y la madera y elementos como los arcos, las cúpulas y las bóvedas. A raíz de la prohibición de representar imágenes, alcanzó gran importancia la decoración interior con pinturas, mosaicos, mármoles, azulejos y yeserías de motivos geométricos, vegetales y caligráficos.
    • Destaca el trabajo de la cerámica, el cristal, el marfil, las miniaturas pintadas en los libros, etc.
  • El arte de Al-Andalus sigue las características generales del arte islámico pero hace algunas aportaciones propias, como el uso de arcos de herradura y lobulados y de bóvedas nervadas en arquitectura. Caben mencionar edificios como la mezquita de Córdoba, la Aljajfería de Zaragoza, el Palacio de la Alhambra, etc.